Neema: “Las mujeres negras en particular están insuficientemente representadas en el arte”

Hace dos veranos Neema Iyer cogió una tableta que encontró en el apartamento de su hermano y empezó a dibujar. Para finales de 2016 ya tenía una cuenta en Instagram dedicada exclusivamente a sus ilustraciones inspiradas en, dice la autora de la imagen de la séptima temporada de Wiriko, “cosas que veo a mi alrededor, muchas de las plantas que aparecen en mi obra son de alrededor de mi casa”.

Los trabajos de esta nigeriana nacida en Lagos y residente en Kampala, Uganda, derrochan dinamismo, alegría de vivir y colorido sobre un fondo que, sin embargo, suele mostrarse en blanco, como la mayoría de mujeres negras que dibuja. “Sentí que las mujeres negras en particular están insuficientemente representadas en el arte. Soy parte de África y de niña la gente trató de hacerme sentir vergüenza por mi piel oscura, aunque nunca dejé que esto me afectara. Sin embargo, hay tantos medios de comunicación y pensamientos culturales que son negativos hacia la piel oscura que trato de plasmar a las bellas mujeres negras en las redes sociales y emparejar este imaginario con algún tipo de vegetación, añadir un poco de tela kitenge o ankara y añadirles mi sello, un círculo”, explica Neema a Wiriko.

Uno de esos pensamientos negativos de los que habla lo experimentó en carne propia a través de una de sus piezas, la que recibe el nombre de ‘La virgen’. “Todas mis musas son mujeres negras pero yo sólo coloreé al bebé que sostiene y mucha gente tuvo un problema con el concepto. ¿Por qué hay una mujer blanca con un bebé negro?, se preguntaban. Yo tengo muchos amigos con matrimonios de raza mixta, y yo estoy en uno también, y soy un producto de ello. La gente siempre hace comentarios sobre sus bebés, la gente solía preguntar a mi madre quién era yo cuando estábamos juntas. Hay mucha insensibilidad con este tema”, manifiesta.

‘La virgen’, ilustración de Neema Iyer

Ante la imagen monocroma que se difunde del continente en general y de las mujeres africanas en particular, a menudo representadas golpeando ñames, cargando vasijas o con niños a la espalda, esta ilustradora incipiente vio en la red social Instagram una ventana para abrir al mundo su visión de África. “Quiero mostrar más de lo que las diferentes partes del continente ofrecen. Su vitalidad, su encanto,… Quiero que esto esté disponible para las personas que están lejos de aquí, ya sea en la Alabama rural o en una isla en el Océano Pacífico. Y esto puedo conseguirlo a través de las redes sociales, donde la gente responde dando ‘Me gusta’ a las imágenes. Esto hace que sienta que de alguna forma he contribuido a un intercambio cultural y social”, señala.

Ahora Neema compagina su labor al frente de la compañía cívico-tecnológica Pollicy con su actividad artística impulsada vía Internet, desde donde ha dado el salto a la pintura en lienzo. “Me han invitado a hacer piezas de arte físicas bajo la tutela de algunos artistas aquí en Kampala. En mayo participé en el Festival de las Artes La Ba!  para crear un mural colaborativo en el que los asistentes pudieron pintar”, comenta emocionada para continuar explicando que en junio tuvo su primera exposición individual a la que “asistieron más de cien personas y todas las piezas se vendieron. Trato de mantener los precios bajos para que sea accesible para la mayoría de la gente”.

En este sentido, la ilustradora se lamenta de que “en Uganda muchos piensan que el arte es algo para la gente de la élite o la gente rica. No llega a otras comunidades y hay poco arte urbano”. Sin embargo, tal y como relata, “durante el Festival de las Artes La Ba! tuve la oportunidad de ver a la gente coger pinceles por primera vez y pasar un buen rato”. De ahí que su próximo proyecto, tal y como adelanta a Wiriko, sea “crear murales colectivos con un propósito social en las comunidades alrededor de Kampala”.

De su futuro como ilustradora confiesa que “pensar en dedicarme al arte a tiempo completo es un poco aterrador, pero es sin duda un sueño que al que aspiro”. Por ello, por lo pronto espera ser capaz de combinar su trabajo en la tecnología, el compromiso cívico y la creación artística. Al fin y al cabo, esta última ocupación es su salida de escape ante la hartura que siente sobre la proyección que aún pesa sobre el continente: “Es tan cansado escuchar a gente hablar sobre África como una entidad homogénea cuando hay tantas culturas y tradiciones diferentes. Tantas que ni siquiera yo las conozco todas, me queda mucho por aprender”.

The following two tabs change content below.

Ruth Fernández Sanabria

Licenciada en Periodismo (UCM) y Máster en Estudios Africanos: Culturas y sociedades africanas (ULL). Fascinada por las realidades que construyen las identidades y convencida del papel de las creaciones artísticas como motor de cambio social. Coordinadora de la sección de Artes Visuales del magacín. (Tenerife) Contacto: ruth@wiriko.org